Reto #2

Reducir esfuerzo percibido
La mente siempre va a intentar ahorrar energía, ahorrar esfuerzo. Es una cuestión de supervivencia.
Nuestro cerebro tiende entonces hacia el fenómeno de la pereza. Una respuesta a un contexto y una motivación.
Cuando vemos nos piden rellenar un campo de email y uno de contraseña en el mismo paso inicial, la mente tenderá a evitar el esfuerzo que ambos campos requieren.
Por ello, suele ser mucho mejor empezar solo con el campo email.
Cuando vamos a registrarnos, o a logarnos, o cualquier otro proceso similar, si lo primero que nos piden es solamente un email, el esfuerzo percibido será pequeño, por lo que tenderemos a hacerlo con mayor probabilidad.
Y una vez que empezamos a hacer algo, tenemos muchas más posibilidades de terminarlo.
Recuerda. Lo realmente difícil es empezar. Empezar lo que sea cuesta esfuerzo. Reduce ese esfuerzo percibido y tendrás más éxito.
Y otro matiz experto: nuestras acciones están influenciadas por la relación entre el esfuerzo necesario para realizar una tarea y la recompensa o resultado esperado.
Por lo tanto, ten en cuenta la recompensa que espera el usuario con tu registro o login, y entonces sabrás cuánto esfuerzo debes reducir.
Y además, aisalando ambos campos en pasos separados, lograremos reducir los errores que cometerán algunas al escribir su email o una contraseña.